Las mesas auxiliares son grandes aliados a la hora de decorar determinados espacios. Su diversidad, versatilidad y funcionalidad las convierte en muebles ideales que combinan su valor decorativo con el funcional. Existe una gran variedad de formas, modelos, tamaños, colores e incluso materiales, lo que nos permite encontrar la mesa ideal en función de nuestros gustos y estilo. En este post vamos a hacer un repaso de los puntos fundamentales a la hora de elegir las mesas auxiliares para cualquier espacio.
Las mesas auxiliares más allá del salón
Aunque estamos acostumbrados a pensar en las mesas auxiliares como muebles ideales para el salón, lo cierto es que pueden ocupar diferentes estancias. Pueden servir por ejemplo, de punto focal para el recibidor o como mesita de noche, para colocar las toallas en el baño o incluso para crear un agradable rincón de lectura en un espacio luminoso de la casa.
En cualquier caso, lo más importante es saber situarlas para que armonicen con el resto de los objetos presentes en este mismo lugar. Esto quiere decir que tenemos que utilizar un criterio estético en el que la armonía sea la norma que prime a la hora de establecer la decoración.
La versatilidad de las mesas auxiliares
Los formatos cuadrados, rectangulares o redondos pueden ser adecuados tanto si buscamos crear una decoración clásica como minimalista. Hemos de fijarnos en lo que nos sugiere la forma y el tamaño de la mesa, pues pueden conseguir aportar ligereza o dotar de formas más pesadas a la estancia, lo que les dará más importancia como muebles dentro del conjunto.
Una buena opción es la de jugar con diferentes mesitas del mismo estilo y material pero que varíen en cuanto a tamaño y altura. Eso nos permitirá aportar a la estancia un estilo decorativo unificado, pero sin que llegue a resultar aburrido ni recargado, simplemente variando los objetos y la decoración que situemos en cada una de ellas.
La textura y el color, en gran parte determinados por el material, serán puntos fundamentales que nos ayudarán a elegir el modelo adecuado. Es muy interesante trabajar con mesas que combinen varios materiales, como por ejemplo el metal y el cristal, la madera o incluso el cuero que les confiere una apariencia muy elegante. La combinación de dorado y negro en una pequeña mesa auxiliar de forma original puede aportar un toque de distinción a una estancia formal.
Por otra parte, las mesas nido de diversas formas y materiales pueden resultar muy decorativas y a la par servir como ampliadores del espacio útil cuando sea necesario, como por ejemplo, a la hora de organizar una cena informal o incluso servir como eventuales asientos.
La funcionalidad de las mesas auxiliares
Por supuesto, no debemos perder de vista que además del criterio estético a la hora de elegir una mesa auxiliar, hemos de valorar el funcional. Las mesas de salón suelen ser bajas para que resulte cómodo acceder a ellas desde el sofá, ya que son el espacio donde solemos colocar el mando de la televisión, los libros o revistas que estemos leyendo e incluso en ocasiones podemos utilizarlas como espacios informales donde comer.
Además, las mesas suelen servir también como espacios de almacenaje extra, especialmente si tienen algún cajón incorporado, un revistero o incluso un cesto.
Las mesas pequeñas y portátiles pueden ser muy útiles para decorar un pequeño espacio de la casa y cuando se precise utilizarlas como pequeños escritorios, donde trabajar con nuestro ordenador portátil o tablet, o donde servir una infusión a nuestros invitados.
En definitiva, las mesas auxiliares constituyen un elemento imprescindible en nuestro hogar por su valor decorativo y funcional.
*Las imágenes incluidas pueden no corresponderse a artículos de Teresa Galán.