Si has echado un ojo en alguna de las tiendas de decoración en Madrid te habrás dado cuenta que a la hora de ver cómo se distribuye una cocina en numerosas ocasiones se fusiona con el salón. Es una de las principales reformas que se han realizado en los últimos años en viviendas, sin contar con los pisos de nueva construcción en que ya viene así estructurado.
La unificación del salón y la cocina no es un tema baladí ni una mera moda pasajera, sino una de las tendencias que ha cobrado más fuerza. Tanta, que todo indica que ha venido para quedarse. Y lo cierto es que no nos extraña, porque son numerosas las razones para hacerlo. Vamos a ver alguna de ellas.
Cocinas cada vez más pequeñas
La reforma para abrir una cocina al salón viene precedida, en buena parte, de otra tendencia anterior. Es aquella por la que, a la hora de aprovechar el espacio de unos pisos cada vez más pequeños se sacrificaba la cocina. De esta manera nos encontramos con viviendas en que no hay siquiera espacio para una mesa y cuatro sillas en la que sentarse a comer.
Si esta acción tan cotidiana, que repetimos varias veces al día, hay que hacerla en otra habitación separada, qué sentido tiene el viaje. De este modo al unir las dos estancias no es necesario salir al pasillo, está todo más cerca y se gana tiempo.
Además, al derribar la pared que tradicionalmente une el salón y la cocina se consigue otra cosa: ganar espacio. Sí, cuando los metros están tan codiciados derribar una pared supone una gran ventaja. Además, al hacerlo, se suele ganar en iluminación y amplitud en ambas estancias.
Ya hablamos de que las cocinas tienden a ser cada vez más pequeñas, así que si tienes invitados a cenar tendrás que estar separado de ellos mientras das los últimos toques al menú. Algo parecido ocurre con quien tiene niños pequeños, que no pueden jugar en la cocina mientras ellos preparan la comida.
Si se unen cocina y salón puede haber personas en ambas estancias que se comuniquen sin paredes de por medio. Así, podrás charlar con los amigos que tengas en casa y disfrutarás de la velada o echarás un ojo a los niños que están jugando mientras acabas de prepararles la cena.
Ideas para conseguirlo
A la hora de unificar ambas estancias las posibilidades de diseño que se abren son numerosas. Incluso, si quieres, puedes jugar y crear dos espacios claramente diferenciados sin perder las ventajas de tenerlos juntos.
Colocando la mesa y las sillas del comedor en el medio darás continuidad a la estancia y podrás diferenciar los dos espacios. Se puede conseguir un efecto similar instalando una barra americana que puede servir también como mesa para desayunos.
Si quieres abrir la cocina al comedor, pero que no se vea como una única habitación puedes colocar elementos divisorios, como es el caso de alguna viga o instalando una puerta corredera que puedas abrir o cerrar cuando desees.
Puedes hacer lo mismo optando por diferentes tipos de suelos o cambiando las tonalidades de la cocina al salón, así como jugando con los complementos. Las posibilidades son numerosas y si te atrae la idea de reformar tu casa uniendo estas dos habitaciones no dudes en contactar con nuestra tienda de decoración en Madrid. Prepararemos un proyecto totalmente personalizado, acorde a tu vivienda y tus necesidades.